La villa Casa de Piedra se fundó en 2007. Una vez construidas la infraestructura de riego con cisternas y sala de bombeo, comenzaron a instalarse los primeros inversores. En los últimos años, la Bodega Provincial y el polo pistachero dispararon su crecimiento, de 150 a 900 hectáreas.
El área productiva de Casa de Piedra resulta la zona bajo riego con mayor crecimiento del país y este año continuará avanzando en ese sentido. Tras un largo proceso de proyección, generación de infraestructura y maduración, en los últimos años comenzaron a multiplicarse las inversiones y los nuevos proyectos, particularmente dedicados a viñedos, pistachos y olivos, todo regado por goteo. “En 2024 pasamos de 150 a 350 hectáreas y calculamos que terminaremos 2025 con unas 900 hectáreas adjudicadas”, anunció Jorge Poletti.
En diálogo con LA ARENA, el presidente del Ente Provincial del Río Colorado aclaró que para garantizar un abastecimiento suficiente para semejante superficie “en la segunda mitad del año pondremos en funcionamiento una nueva toma sobre el río Colorado y otra cisterna de medio millón de litros”, obras licitadas y adjudicadas a finales del año pasado que ya se encuentran en ejecución.
“Aunque dejó un balance sumamente positivo, el año pasado tuvimos que distintas complicaciones precisamente porque durante un largo tiempo regamos una superficie limitada a 150 hectáreas, que repentinamente en 2024 se extendió a más del doble”. En ese contexto, el agua sobraba y no fueron necesarias grandes inversiones en mantenimiento aún cuando “los emprendimientos mendocinos de Catena y Cassone mantenían una producción razonable y la Chacra Experimental del Ente sostenía muchas variedades demostrativas y cubría la demanda de uva de bodegas locales”.
El polo pistachero.
Uno de los factores que modificó ese estado de cosas fue la aparición del pistacho, iniciada por Pampa Pits de la familia Gutiérrez, y continuada por la Caja Forense, Erick Sabaidini y otros emprendedores entusiasmados por el excelente potencial, productivo y económico, que exhibe esta variedad. “Este rápido crecimiento del área de pistachos agrandó en 2,5 veces la superficie bajo riego, que ya llega a casi 400 hectáreas. A lo largo de este año, ese crecimiento “probablemente duplicara nuevamente la superficie, que para fin de año llegaría a unas 900 hectáreas”.
De todos modos, aunque no es posible aventurar “si todas estarán en producción para el año que viene”, durante el segundo semestre del año “pondremos en funcionamiento la segunda cisterna, actualmente está en construcción, y una nueva toma de agua” sobre el Colorado, que garantizarán capacidad para regar unas 1.20 hectáreas. Según Poletti, la ejecución de la obra de “toma e impulsión” ya cuenta con un avance cercano al 50% y se utilizará “en dos etapas: la primera servirá unas 500 hectáreas de cultivo y la abastecerá la demanda futura de 500 hectáreas adicionales”, cuando todos los proyectos se encuentren en marcha.
Gran inversión profesional.
Poletti reconoció que la inversión que pateó el tablero provino de la Caja Forense. “Adquirieron una cantidad muy importante de hectáreas con la idea de desarrollar la producción escalonadamente, en tres parcelas de 54, 31 y 53 hectáreas”. Sin embargo, finalmente “arrancaron con las 138 hectáreas en forma casi simultánea, lo cual significó una demanda de agua que complicó un poco el dispositivo de riego”.
Además, actualmente hay “al menos cuatro proyectos en proceso de presentación que probablemente estarán adjudicados para fin de año”. Junto al pistacho, olivos y viñedos son las especies dominantes del polo productivo. “También se han presentado otras variantes de frutos secos, pero representarían una porción minoritaria”, explicó.
Los terrenos fiscales bajo riego que el EPRC ofrece a los inversionistas “alcanzan hoy un valor de mil dólares por hectárea”. La metodología requiere una “presentación del proyecto de inversión para que sea evaluado. En caso de ser aprobado, se suscribe un boleto de compra venta”. A diferencia de las etapas previas, cuando el acceso a la titularidad de la tierra resultaba muy simple y podía escriturarse con un determinado porcentaje de avance, “ahora deben estar todo el proyecto en marcha y la totalidad del pago cumplido, para poder escriturar,, además de respetar el requisito de no mantener deudas con el Estado provincial”.
Bodega y vendimia.
A medida que se acerca la vendimia se aceleran las tareas logísticas para garantizar los mejores resultados en Casa de Piedra. “Esperamos otra buena cosecha, aunque resultará menor que el año pasado porque los viñedos fueron afectados por algunas contingencias climáticas adversas”, aclaró Poletti.
Aunque el área de viñedos también creció, “los primeros años son de baja producción, así que esperamos continuar en el promedio general de los últimos años, en unos 105 mil kilos, volumen que alcanzará para abastecer la demanda mínima de los bodegueros locales”, añadió.
Mientras tanto, la Bodega Provincial, que para la cosecha 2026 permitirá que los regantes de Casa de Piedra puedan vinificar con sello patagónico, “lleva ya un avance del 75% en su construcción”. De todos modos, Poletti se excusó de ofrecer mayores detalles porque el proyecto no corresponde al EPRC y “lo único que sabemos es lo anunciado por el gobernador: que la bodega será operada por un fideicomiso”, confesó.
(La Arena)